RETRATO
Antonio Machado

Mi infancia son recuerdos de un patio de Sevilla,

y un huerto claro donde madura el limonero;

mi juventud, veinte años en tierras de Castilla;

mi historia, algunos casos que recordar no quiero.

Ni un seductor Mañara, ni un Bradomín he sido

—ya conocéis mi torpe aliño indumentario—,

más recibí la flecha que me asignó Cupido,

y amé cuanto ellas puedan tener de hospitalario.

Hay en mis venas gotas de sangre jacobina,

pero mi verso brota de manantial sereno;

y, más que un hombre al uso que sabe su doctrina,

soy, en el buen sentido de la palabra, bueno.

Adoro la hermosura, y en la moderna estética

corté las viejas rosas del huerto de Ronsard;

mas no amo los afeites de la actual cosmética,

ni soy un ave de esas del nuevo gay-trinar.

Desdeño las romanzas de los tenores huecos

y el coro de los grillos que cantan a la luna.

A distinguir me paro las voces de los ecos,

y escucho solamente, entre las voces, una.

¿Soy clásico o romántico? No sé. Dejar quisiera

mi verso, como deja el capitán su espada:

famosa por la mano viril que la blandiera,

no por el docto oficio del forjador preciada.

Converso con el hombre que siempre va conmigo

—quien habla solo espera hablar a Dios un día—;

mi soliloquio es plática con ese buen amigo

que me enseñó el secreto de la filantropía.

Y al cabo, nada os debo; debéisme cuanto he escrito.

A mi trabajo acudo, con mi dinero pago

el traje que me cubre y la mansión que habito,

el pan que me alimenta y el lecho en donde yago.

Y cuando llegue el día del último vïaje,

y esté al partir la nave que nunca ha de tornar,

me encontraréis a bordo ligero de equipaje,

casi desnudo, como los hijos de la mar.

Thank you Donald for inviting me to become part of the editorial team on bladeoftime.

CRUSADE

A hot summer day
Queens Corona Park
From around the world
The last public appearance
The greatest speakers
The unique and majestic park
I was astounded
Five or maybe six football stadiums
People every where
You had to walk very slowly
Surprised to find out
Sat down on the grass
Without the super vigilancy of the police, secret service
People of all races and colors were
Behaving as if they had done this before.
Amazing
Tranquility
Peace

My trip to the Billy Graham crusade

On the afternoon of a hot summer day in June of 2005, the NYC Rescue Mission had the courtesy to invite me to Flushing Meadows Park in Corona Queens. On this beautiful afternoon the people, from around the world, were reunited for what could be the last public appearance of one of the greatest speakers in the world today: “Dr. Billy Graham”.

When I arrived at this unique and majestic park located in Queens, New York, I was astounded by the number of people. It was like when you come out of five or maybe six football stadiums at the same time. There were so many people everywhere that you had to walk very slowly. Even a two year old baby would be able to keep up the pace in this huge crowd of people.

When I arrived at what looked like the principal stage, I was surprised to find out that it was one of the relay broadcasting centers located in the giant park. One with giant TV screens and had enough chairs to seat people. I sat down in the grass. It was more suitable for me to find a small tree and watch the magnificent event in a cool place.

I have never seen so many people reunited in one place at one single time and without the super vigilance of the police, secret service, coast guard, etc… This is what impressed me most about the event. It was not a political or athletic event but a religious event and during the event, I have the pleasure to say there was no one out of line. People of all races and colors were behaving as if they had done this before. It was an event marked by tranquility. Peace was in the air. I enjoyed it and thanks again to the “New York City Rescue Mission” staff for giving me the opportunity to be part of this unique event. If I had not gone, I don’t know what I would have missed.

Buenos días, a todos los que tienen el placer de visitar ésta página de internet, muchas gracias de antemano. La siguiente es una copia de una canción que mis Tíos y mi papá cantaban cuando aún era un Niño.

LA RUANA

Autor: Letra: Luis C. Gonzalez/ Música: José Macias
Ritmo: Bambuco.

La capa del viejo hidalgo
se rompe para hacer ruana,
y cuatro rayas confuden
el castillo y la cabaña,
es fundadora de pueblos
con el tiple y con el hacha,
y con el perro andariego
que se trago las montañas.

Abrigo del macho macho
cobija de cuna paisa
sombra fiel de los abuelos
y tesoro de la patria.

Sabor de pecado dulce
y dulce calor de faldas
grita con sus cuatro puntas
el abrazo de la ruana.

Porque tengo noble ancestro
de Don Quijote y Quimbaya,
hice una ruana antioqueña
de una capa castellana.

Por eso cuando sus pliegues
abrazo y ellos me abrazan
siento que mi ruana altiva
me está abrigando es el alma.

Gracias a los amigos de " Nuestra Colombia" por ésta copia de La Ruana.

Hello World!