Agüero: la nueva esperanza
La lleva atada a los botines porque para los cracks de su dimensión,
balón y pie son una sola pieza. Por eso mira adelante, atrás a los costados,
nunca abajo porque eso queda para los mediocres que corren con la
cabeza agachada para no perder de vista la esférica.
El es el dueño de ese artefacto saltarín, miente con la cintura y con
las piernas para engatusar defensas, volantes de contención que
reciben la orden de no dejarlo tocar la pelota, de seguirlo hasta los vestuarios,
de impedirle que haga lo que más sabe: crear, inventar sobre la marcha,
poner pases-gol, llegar hasta el área y desparramar por el piso a su
celador o al arquero, o pegarle con justeza para meterla en el ángulo y
provocar el estallido en el estadio vestido de rojo en su honor.
Es la nueva sensación del fútbol Argentino, se llama SERGIO AGÜERO,
le dicen “ KUN”, tiene 17 años y es la gran atracción en cualquier
cancha. Es el jugador más joven en debutar en su país pues lo hizo el
06 de Julio del 2003, cuando apenas andaba por los 15 años,
un mes y tres días de edad. Desde su primera aparición dejó claro que
se trataba de un legítimo heredero de Manuel Seaone, Antonio Sastre y
Ricardo Bochini. Esto de alumbrar estrellas es tan frecuente en el balompié
gaucho que ya nadie pude hablar de milagros. Por algún rincón de esa
Argentina maravillosa, mientras estoy tacleando para escribir esta nota,
"ésta naciendo un mago del balón".
Menudo problema para el seleccionador José Pekerman. Todas las voces se
levantan para pedir al ‘Kun’ para la albiceleste. Sergio Agüero, el crack de 17 años.
Lo piden para la Selección, lo buscan Barcelona y Real Madrid. Muchos
sueñan con juntarlo con Messi para que destrocen defensas como lo hicieron
en el Mundial Juvenil 2005 en Holanda. Pero Pekerman no habla hasta hoy.
Sabe que queda poco espacio y que debe elegir a gente más experimentada como
Saviola, el Jardinerito Cruz, Diego Milito, o como ese delantero explosivo que
es el boquense Rodrigo Palacios.
Quizás esté pensado que Agüero está joven y puede esperar.
Es la misma disyuntiva que vivió Julio César Menotti en 1978 cuando despidió
de la selección a Diego Armando Maradona por su juventud. El equipo de
Pekerman tiene problemas de funcionamiento y los relevó en los dos
últimos amistosos que perdió en Europa. Se habla de un tenso clima de vestuario
por la enemistad de varios jugadores. Pero cualquier técnico del mundo vería
el fútbol con esperanzas si tuviera en su equipo a Lionel Messi y Sergio Agüero,
"dos nombres que llenaran el Universo del Fútbol por muchos años".
La lleva atada a los botines porque para los cracks de su dimensión,
balón y pie son una sola pieza. Por eso mira adelante, atrás a los costados,
nunca abajo porque eso queda para los mediocres que corren con la
cabeza agachada para no perder de vista la esférica.
El es el dueño de ese artefacto saltarín, miente con la cintura y con
las piernas para engatusar defensas, volantes de contención que
reciben la orden de no dejarlo tocar la pelota, de seguirlo hasta los vestuarios,
de impedirle que haga lo que más sabe: crear, inventar sobre la marcha,
poner pases-gol, llegar hasta el área y desparramar por el piso a su
celador o al arquero, o pegarle con justeza para meterla en el ángulo y
provocar el estallido en el estadio vestido de rojo en su honor.
Es la nueva sensación del fútbol Argentino, se llama SERGIO AGÜERO,
le dicen “ KUN”, tiene 17 años y es la gran atracción en cualquier
cancha. Es el jugador más joven en debutar en su país pues lo hizo el
06 de Julio del 2003, cuando apenas andaba por los 15 años,
un mes y tres días de edad. Desde su primera aparición dejó claro que
se trataba de un legítimo heredero de Manuel Seaone, Antonio Sastre y
Ricardo Bochini. Esto de alumbrar estrellas es tan frecuente en el balompié
gaucho que ya nadie pude hablar de milagros. Por algún rincón de esa
Argentina maravillosa, mientras estoy tacleando para escribir esta nota,
"ésta naciendo un mago del balón".
Menudo problema para el seleccionador José Pekerman. Todas las voces se
levantan para pedir al ‘Kun’ para la albiceleste. Sergio Agüero, el crack de 17 años.
Lo piden para la Selección, lo buscan Barcelona y Real Madrid. Muchos
sueñan con juntarlo con Messi para que destrocen defensas como lo hicieron
en el Mundial Juvenil 2005 en Holanda. Pero Pekerman no habla hasta hoy.
Sabe que queda poco espacio y que debe elegir a gente más experimentada como
Saviola, el Jardinerito Cruz, Diego Milito, o como ese delantero explosivo que
es el boquense Rodrigo Palacios.
Quizás esté pensado que Agüero está joven y puede esperar.
Es la misma disyuntiva que vivió Julio César Menotti en 1978 cuando despidió
de la selección a Diego Armando Maradona por su juventud. El equipo de
Pekerman tiene problemas de funcionamiento y los relevó en los dos
últimos amistosos que perdió en Europa. Se habla de un tenso clima de vestuario
por la enemistad de varios jugadores. Pero cualquier técnico del mundo vería
el fútbol con esperanzas si tuviera en su equipo a Lionel Messi y Sergio Agüero,
"dos nombres que llenaran el Universo del Fútbol por muchos años".
